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El Municipio de Brown auspicia el registro único de artistas

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Una instancia de diálogo enderezada a construir consensos, permite avanzar en la creación del RUAB y suma gran expectativa entre los artistas locales.

La Secretaría de Educación, Cultura y Derechos Humanos de la Municipalidad de Almirante Brown realizó la reunión inaugural del ciclo de encuentros que tendrá lugar los próximos dos meses junto a referentes del colectivo de artistas con actuación en distintas disciplinas. El primer turno fue para los músicos brownianos.

El diagrama de reuniones periódicas, propiciado por el secretario del área, Esc. Jorge Herrero Pons, busca conocer las actuales demandas e intereses de cada sector y está en línea con las políticas de promoción y fomento de los valores artísticos locales. En este sentido, el municipio impulsa la creación del Registro Único, que no sólo otorgará entidad al artista local situándolo como sujeto de derecho, sino que lo reconocerá en cada categoría asignándole beneficios.

La primera reunión estuvo dedica en particular a la música y la ronda de deliberaciones contó con un grupo de exponentes del folklore, el tango, la música clásica, el rock, el jazz y el candombe.

Agustín Kolaric, director de la Orquesta Municipal de Tango, sostuvo : “La idea del secretario Herrero Pons es intercambiar miradas sobre las problemáticas que aquejan a los artistas locales, ideando un camino para la construcción de soluciones consensuadas con eje en la protección y promoción de nuestros hacedores culturales”.

Durante el encuentro, los artistas pusieron de manifiesto su reconocimiento y gratitud, luego que el gobierno municipal abriera la convocatoria pública a todos los músicos que quisieran presentar material discográfico en los espacios culturales pertenecientes al municipio.

Las reuniones continuarán a lo largo de los próximos dos meses encabezadas por los responsables municipales de la programación de cada disciplina.

La intención es construir consensos, a partir de una activa y plural participación de todos los hacedores culturales, asignando prioridad a un modelo de gestión que garantice la permanente democratización en el acceso y circulación de bienes y servicios culturales.